viernes, 5 de marzo de 2010

MEMORIA DECONSTRUCTIVA


Aparecen y desaparecen. Entran en escena como fantasmas holográficos cuando menos lo esperás. Sin memoria del pasado no recuerdan, o hacen que no recuerdan y montan escenas de grandes protagónicos con frases destructivas. Se olvidan, se olvidan de lo que hicieron y juzgan de mala gana lo que otros están haciendo o intentan hacer.
Te invocan y en tu nombre estallan y despliegan grandes construcciones , de lugares comunes, vacías en contenidos. Dicen y no dicen nada.
Acusan, con el dedito levantado. Aseguran los males de los otros y omiten decir los males que ellos han hecho. Se esconden cuando ellos deben ser juzgados y sólo aparecen para entorpecer y generar pánico. Asustan, confuden, evaden, marean. Sus apariciones marean. Hablan de nuevos cambios y son ellos los viejos aires. Ellos, que oscurecieron todo lo que debía tener un aura clara. Y ahora estorban, molestan, frenan, enferman, paralizan. Colocan palos en la rueda sería la frase correcta. No dejan que nada crezca. No dejan que nada evolucione.
Lo que hacían cuando estaban con los pantalones bajos, hoy lo critican. Sin argumentos, sin propuestas. Y acusan, subestiman, traicionan. Usan la ley como freno y a los jueces como escudos. Y eso aumenta la desconfianza en esa mujer con los ojos tapados que sólo se guía por el peso de las cosas en una balanza. Esa , que busca el equilibrio y el orden.
Y se olvidan de los que sufren, de los que padecen por lo que ellos han hecho en el pasado. Ese, que casualmente no recuerdan.
No quieren que entiendas, prefieren que no sepas. La gente no tiene que entender, afirman dejarte al margen así ellos operan por vos.
Se oponen porque dicen que para eso están. Pero se oponen por capricho, por déspotas, por ansias de poder, de protagonismo. Y hacen chistes, emulan a grandes cómicos aunque no les sale. Fracasan porque dan risa, pero de vergüenza ajena.

Y no paran. Siguen. No se conforman. Piden que se haga y cuando se hace, se oponen igual. Y manchan todo lo que pensás, lo que creés, lo que buscás., lo que deseas. Cometen los más grandes ridículos y los más grandes movimientos derrocadores. A los gritos enfurecidos se oponen a todo y no defienden nada. No hay nada en el fondo, no hay fondo en la nada. Están vacíos, privados de gloria por su incapacidad. Privados de respeto por su maldad.
No pensaron en uno antes, tampoco lo hacen ahora. Nos usan en sus palabras creyendo que hablan por todos y así nos entierran a todos en el mismo lodo.
No hay crítica constructiva, hay evasiva destructiva.

No lo están haciendo por vos, lo están haciendo por ellos. Y ensucian tu nombre para tambien ensuciar tu futuro.
Seamos más astutos que ellos y no los dejemos detenernos.

Escuchemos aunque nos tapen los oídos. Veámos aunque nos cubran los ojos.
No olvidemos, aunque ellos olviden...

2 comentarios:

  1. Y me gustaría agregar algo importante, para los despistados y los olvidadizos, Φαίδρα: Una oposición real siempre tiene menos voz.

    Y se agradece la contundencia, que en estos tiempos es vital cuando se expone una idea que vale la pena exponer.

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  2. Y para colmo, los fabricante de altavoces les acercan sus megáfonos a la boca.

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